Una última visita rapida al área limpia para ver a través del cristal del despacho de ISL como el equipo ucraniano desmontaba los anillos interiores del módulo ISL y por fin hemos visto dónde irá colocado OPTOS.
Luego una comida rápida porque a la una y media sale el transporte hacia el aeropuerto de Orsk. Así que dos horas y media más de carreteras rusas. Empiezo a pensar que el término montaña rusa lo inventó alguien que pasó por estas carreteras supuestamente llanas.
Lo que sí me ha quedado claro en estos cuatro días en la base de lanzamiento es que los filetes rusos son efectivamente rusos. Todos los días los teniamos en cualquier variedad tanto para comer como para cenar, no se como no los ponen también en el desayuno.
Y por fin tras los baches, ya estamos en el aeropuerto esperando que salga nuestro avión hacia Moscú.
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